La historia de las tiendas Madre Tierra.
Desde hace más de 20 años mi familia y yo iniciamos un cambio radical en nuestras vidas. De vivir en la gran ciudad de México e invertir una gran cantidad de tiempo en transportarnos, decidimos venir a una ciudad pequeña llamada San Miguel de Allende, en una época donde los capitalinos amanecíamos siempre pendientes de la contaminación ambiental y de los famosos Imecas.
Con nuestros dos hijos pequeños queríamos poner en práctica nuestro sueño de vivir en una casa de campo donde poderlos criar en un ambiente limpio y seguro.
No solo participamos entonces en la creación de escuelas nuevas con conceptos diferentes a las que existían, sino que participamos con otros padres de familia en educación ecológica como hacer composta, cuidar los árboles sembrados por nosotros, iniciar una hortaliza y huerto en casa, visitar ranchos de vacas y siembra, y hasta tener gallinas ponedoras.
Así que nuestro interés en la naturaleza se convirtió en el nombre de la primera tienda que abrimos justo al iniciar el nuevo milenio.
En ella, incluimos en ese entonces igual que ahora, un conjunto de productos que ayudaban a hacer conciencia sobre el respeto a la naturaleza, camisetas que hablaban de la conservación, libros y carteles que mostraban la diversidad de la flora y fauna mexicanas, así como de nuestra cultura.
Nuestro cotidiano se convirtió en un jardín que de cero fue tomando forma de huerto, hortaliza, y jardín de hierbas aromáticas y cactáceas, hasta ocupar más de la mitad del terreno de la casa.
Así empecé a identificar aromas y a experimentar con ellos y desde entonces mezclas como la de romero menta, cedro eucalipto, lavanda verbena y jazmín limón por ejemplo empezaron a ocupar la preferencia de nuestros clientes.
Esas mismas esencias, inspiraron los aromas de jabones, velas, aceites para masaje, aromaterapias que, desde hace varios años, elaboramos en nuestro pequeño taller y son ahora parte de los productos de nuestras tiendas.
Hace más de cinco años, incluí en nuestro catálogo tes, tisanas herbales y frutales que faltaban para cerrar el círculo de la aromaterapia en sentido amplio.
Encontré en diversos libros, conferencias, cursos y pláticas que la combinación de aromas en aceites y en hierbas, tienen las mismas propiedades para hacernos sentir bien.